El Evangelio Eterno

Jesucristo es el evangelio de Dios. Él conquistó la muerte y todo mal con su gran amor demostrado en la cruz. Todo el que cree en él para salvación recibe gratuitamente los logros de su gran victoria sobre el pecado y la muerte. Pasamos eternamente de muerte a vida. ¡Alabado y glorificado sea el nombre del Señor Jesús!

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lunes, julio 03, 2006

El "Testimonio de Jesús" pertenece a la Divinidad

El "Testimonio de Jesús" señala, apunta a su caracter divino:

Juan 5:
"31 Si yo doy testimonio de mí mismo, mi testimonio no es verdadero. 32 El que da testimonio de mí es otro, y sé que el testimonio que da de mí es verdadero."

¿Quién será ese "otro" que da testimonio de Jesús? ¿Será algún profeta, que habiendo recibido "el espíritu de profecía" da "testimonio de Jesús"?

En los vs. 33 y 34 Jesús se refiere a Juan el Bautista. ¿Pudiera ser que Jesús se refería al ministerio profético de Juan el Bautista? ¿Qué dice Jesús en esos versículos?

"33 Vosotros enviasteis mensajeros a Juan, y él ha dado testimonio de la verdad. 34 Pero yo no recibo el testimonio de parte del hombre".

Jesús responde que aunque Juan acertadamente testificó que Jesús era el Cordero de Dios, Jesús no recibía "testimonio de parte del hombre".

El ministerio profético de Juan el Bautista no era el testimonio de Jesús, porque Jesús no recibía testimonio de ser humano alguno.

Jesús tiene alguien más que da testimonio de él. Esa otra persona es tan grandiosa y sublime que cualquier otro testimonio humano se desvanece en lo insignificativo.

El testimonio que recibe Jesús proviene de una fuente mayor, de la más grandiosa y sublime.

36 Pero yo tengo un testimonio mayor que el de Juan; porque las obras que el Padre me ha dado para cumplirlas, las mismas obras que hago dan testimonio de mí, de que el Padre me ha enviado. 37 Y el Padre que me envió ha dado testimonio de mí. Pero nunca habéis oído su voz, ni habéis visto su apariencia, 38 ni tenéis su palabra permaneciendo en vosotros; porque vosotros no creéis a quien él envió.

El testimonio de Jesús proviene del Padre mismo. Esa es la razón por la que Jesús no recibe testimonio de ningún ser humano. El testimonio de Jesús es de sustancia divina, porque proviene del Padre y se encuentra en el Hijo.

Las escrituras plasman por escrito el testimonio del Padre, pero las escrituras no son el testimonio de Jesús. Es el mismo Padre quien da testimonio de su Hijo. El Padre mismo es el testimonio de Jesús. El profeta jamás puede ser el testimonio de Jesús, pues este testimonio pertenece solo al Padre quien lo envió.

Este caracter divino del testimonio de Jesús lo veremos con mayor claridad cuando regresemos a Apocalipsis 19:10.

El testimonio de Jesús es el testimonio de Dos Seres Divinos

La naturaleza divina del testimonio de Jesús se confirma contundentemente en Juan 8:17,18.

17 En vuestra ley está escrito que el testimonio de dos hombres es verdadero. 18 Yo soy el que doy testimonio de mí mismo, y el Padre que me envió también da testimonio de mí.

Estas son las palabras de Jesús que grabó el apóstol Juan en su evangelio.

No son las palabras de ningún profeta. Son las palabras de Jesús. El testimonio de Jesús es el testimonio que él y el Padre dan de la obra redentora pactada por ellos para redimir a la humanidad, a quienes tanto aman, "para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna."

Por tanto "el testimonio de Jesús" se refiere al nuevo pacto de Dios con la humanidad. Ese pacto juramentado y cumplido por Cristo Jesús de dar su vida como Cordero de Dios en sacrificio santo por el perdón del pecado de toda la humanidad. Alabado y glorificado sea el Señor Jesús, ahora y para siempre, amén.